¿URIBE SATISFECHO?

 Eso es lo que se lee en los periódicos al dar marcha atrás Chávez después de su plasta verbal amenazando a Colombia con la guerra. El Presidente Uribe tropezó dos veces con la misma piedra: cuando eligió a Chávez en la primera entrega de los rehenes de las FARC, dándole una imagen internacional que le hizo pretender el Premio Nobel de la Paz, y al no utilizar después las delatoras computadoras de Raúl Reyes no llevándolas al Tribunal de La Haya. Se equivocó en ambas oportunidades el mandatario neogranadino a sabiendas de que su homólogo venezolano no es de fiar. La fortaleza del Jefe de Gobierno colombiano reside ahora en las cuestionadas 7 bases norteamericanas que traen de cabeza no sólo a Chávez, como también al par de mendigos de Bolivia y Ecuador y a las focas parlamentarias locales, que habrán de salir, Dios mediante, en las elecciones del próximo año. Los electores venezolanos harán una faenaza de profilaxia. Cuando lleguen a Venezuela los tanques rusos y el armamento recién negociado veremos a Chávez nuevamente alardear de su poderío. ¿O es que todavía no conocen al estrafalario aguajero de Sabaneta? No se le ocurra pifiar por tercera vez, Presidente Uribe.