Ambos grupos terroristas mantuvieron al menos tres reuniones operativas en Colombia según la información a la que ha tenido acceso la CADENA SER de España y que fue incautada a ETA en Francia por las fuerzas de seguridad del Estado.
Según estos informes que están ya a disposición de la justicia, ETA reconoce que durante siete días en el año 2003, dos de sus miembros intercambiaron técnicas y procedimientos con dos de los máximos dirigentes de las FARC en uno de los campamentos de la guerrilla.
Lo más importante del contenido de estos documentos es que proceden de ETA y no de las FARC. Hasta ahora solo las guerrillas de las FARC habian reconocido estos contactos y no de la forma tan detallada como lo hace la organización terrorista ETA.
En estas actas de reunión, ETA reconoce que los contactos fueron oficiales y que se nombraron interlocutores oficiales, que no aparecen identificados en estos documentos. Lo que sí se sabe es que por parte de las FARC el interlocutor fue un miembro del Secretariado Nacional de las FARC, el máximo organo de dirección.
Intercambio
Las guerrillas de las FARC se ofrecieron para ocultar a miembros de ETA durante el tiempo que fuese necesario. Las FARC a cambio solicitaron a ETA voluntarios expertos en medicina que pudiesen ayudar en los campamentos de prisioneros durante más de un año y armamento antiaéreo, como un sistema lanzamisiles tierra-aire, un SAM 7, el mismo modelo que se encontró en un arsenal de ETA que se encontró en octubre del 2004 tras la detención en Francia de Mikel Antza.
Durante esta semana de entrenamiento que se realizó en Colombia ETA reconoce que ambos grupos terroristas intercambiaron técnicas de combate. Entre los procedimientos que recogen estas actas está la forma en que las FARC utilizan los teléfonos móviles para hacer explosionar los artefactos explosivos, o la posibilidad de usar pintura anticorrosiva en vez de polvo de aluminio para hacer junto el nitrato de amonio, amonal. Por su parte los miembros de las FARC mostraron su interés por la experiencia de ETA en la construcción de 'zulos'.
Objetivos
Además las FARC pidieron a ETA que realizase atentados y secuestros en Europa contra alguno de sus objetivos. Según recogía el ordenador del comandante de las FARC, Raúl reyes, entre los objetivos que podrian residir en nuestro país estaban Andrés Pastrana, la embajadora de Colombia en España desde el 2002 hasta el 2008, Noemí Sanín, y el actual vicepresidente colombiano, Francisco Santos.
Estos informes policiales de la Guardia Civil y de la Policía fueron tratados en una reunión que se celebró con las autoridades colombianas en Colombia y a la que acudió la Policía, no la Guardia Civil y la Fiscalía.
Ni judicialmente ni policialmente se tiene constancia de que ETA haya llegado a colaborar operativamente con las FARC en la comisión de atentados o secuestros contra personas consideradas objetivo de las guerrillas colombianas durante estos cinco años.
Según estos informes que están ya a disposición de la justicia, ETA reconoce que durante siete días en el año 2003, dos de sus miembros intercambiaron técnicas y procedimientos con dos de los máximos dirigentes de las FARC en uno de los campamentos de la guerrilla.
Lo más importante del contenido de estos documentos es que proceden de ETA y no de las FARC. Hasta ahora solo las guerrillas de las FARC habian reconocido estos contactos y no de la forma tan detallada como lo hace la organización terrorista ETA.
En estas actas de reunión, ETA reconoce que los contactos fueron oficiales y que se nombraron interlocutores oficiales, que no aparecen identificados en estos documentos. Lo que sí se sabe es que por parte de las FARC el interlocutor fue un miembro del Secretariado Nacional de las FARC, el máximo organo de dirección.
Intercambio
Las guerrillas de las FARC se ofrecieron para ocultar a miembros de ETA durante el tiempo que fuese necesario. Las FARC a cambio solicitaron a ETA voluntarios expertos en medicina que pudiesen ayudar en los campamentos de prisioneros durante más de un año y armamento antiaéreo, como un sistema lanzamisiles tierra-aire, un SAM 7, el mismo modelo que se encontró en un arsenal de ETA que se encontró en octubre del 2004 tras la detención en Francia de Mikel Antza.
Durante esta semana de entrenamiento que se realizó en Colombia ETA reconoce que ambos grupos terroristas intercambiaron técnicas de combate. Entre los procedimientos que recogen estas actas está la forma en que las FARC utilizan los teléfonos móviles para hacer explosionar los artefactos explosivos, o la posibilidad de usar pintura anticorrosiva en vez de polvo de aluminio para hacer junto el nitrato de amonio, amonal. Por su parte los miembros de las FARC mostraron su interés por la experiencia de ETA en la construcción de 'zulos'.
Objetivos
Además las FARC pidieron a ETA que realizase atentados y secuestros en Europa contra alguno de sus objetivos. Según recogía el ordenador del comandante de las FARC, Raúl reyes, entre los objetivos que podrian residir en nuestro país estaban Andrés Pastrana, la embajadora de Colombia en España desde el 2002 hasta el 2008, Noemí Sanín, y el actual vicepresidente colombiano, Francisco Santos.
Estos informes policiales de la Guardia Civil y de la Policía fueron tratados en una reunión que se celebró con las autoridades colombianas en Colombia y a la que acudió la Policía, no la Guardia Civil y la Fiscalía.
Ni judicialmente ni policialmente se tiene constancia de que ETA haya llegado a colaborar operativamente con las FARC en la comisión de atentados o secuestros contra personas consideradas objetivo de las guerrillas colombianas durante estos cinco años.
Tomado de Cadena SER.