Analistas consideran que esa es la razón por la cual no se han podido restablecer relaciones diplomáticas. Diálogo, la única salida posible.
Mientras el presidente Rafael Correa no le dé vuelta a la página de lo ocurrido durante la Cumbre de Mandatarios de Río, celebrada en marzo de este año en República Dominicana, será casi imposible que se restablezcan las relaciones diplomáticas entre Ecuador y Colombia.
Así lo consideran analistas de ambos países, quienes aseguraron que a Correa le dolió el ataque del Ejercito colombiano a las Farc en su territorio, donde fue dado de baja ‘Raúl Reyes’, pero no tanto como el hecho de que el presidente Álvaro Uribe Vélez haya dejado en evidencia, y en una cumbre internacional, sus vínculos con la guerrilla de las Farc.
Durante el encuentro, el Primer Mandatario colombiano leyó con fechas y nombres los correos en los que los máximos cabecillas de esa guerrilla mantenían comunicación con altos funcionarios del Gobierno del vecino país.
Ese es, de acuerdo con el asambleísta ecuatoriano Andrés Pabón “el gran resentimiento del presidente Correa”.
“Incluso, tengo unos documentos del Gobierno de Panamá que evidencian esa estrecha relación entre Correa y las Farc. Y si a esa situación le suma la pugna en el continente entre la derecha y la izquierda, eso hace más difícil que se pueda dar un acercamiento”, dijo Pabón.
Para el internacionalista Enrique Serrano el presidente Correa no sólo no ha superado lo vivido en la cumbre, sino que mantiene una actitud vergonzante.
“Es como si antes del ataque al campamento de las Farc en el mes de marzo, ya el Presidente de Ecuador tuviera cosas que ocultarle al Gobierno de Colombia y eso dificulta el acercamiento”, dijo Serrano.
El analista Juan Manuel Charry comparte la apreciación de que no es fácil el restablecimiento de las relaciones, “pero porque se han radicalizado las posiciones y eso hace necesario buscar una salida por la vía diplomática”.
“Sin duda Correa tiene un argumento fuerte que es la intangibilidad del territorio y que Colombia violó su soberanía, pero a su gobierno también le disgustó mucho que se revelara la información de los computadores de ‘Reyes’”, dijo Charry.
"Para poder encontrar una salida que permita superar la crisis diplomática que existe entre los gobiernos de Colombia y de Ecuador es necesario despolitizar y despersonalizar las relaciones binacilonales”. Enrique Serrano, internacionalista. "Las más beneficiadas con el rompimiento de las relaciones diplomáticas entre Colombia y Ecuador son las Farc que, sin los operativos conjuntos, se les facilita el tráfico de drogas y armas”. Juan M. Charry, analista.
No son muchas las salidas
De acuerdo con los especialistas, el único lugar en el que se pueden encontrar los dos gobiernos y buscar alternativas para superar las diferencias es en el diálogo.
Lenín Hurtado, otro asambleísta ecuatoriano, asegura que Correa ha buscado por todos los medios la normalización de las relaciones, pero no ha habido un planteamiento serio de parte de Colombia.
“No es que el presidente Correa quiera escuchar una disculpa o algo del Gobierno colombiano. Por el contrario, lo que no quiere es escuchar a Uribe hablando de acercamientos y voluntad, y que luego salga uno de sus ministros a decir que en Ecuador protegemos a la guerrilla de las Farc”, indicó Hurtado.
En contraposición a él se mostró el internacionalista Serrano, quien dijo que Correa no ha sido receptivo con las intenciones manifiestas de Colombia de hallarle una salida a la crisis binacional.
En su concepto, se deben establecer programas de cooperación militar, en infraestructura y política exterior que estrechen la relación entre los países.
La propuesta de Charry, además de buscar un acercamiento diplomático, es que se vincule a un tercer país.
“Esa confianza que reclama Correa está lejos de restablecerse y habría que pensar en la mediación de un tercer país como Brasil y el presidente Luis Inacio Lula da Silva”, señaló el analista.
Pero para cualquier salida es necesaria la voluntad política y esa es, según lo dicho por los gobiernos de Ecuador y Colombia, lo que no ha tenido su contraparte.
Mientras tanto, las Farc continuarán sacando provecho de la falta de comunicación y de operativos conjuntos que dificultan aún más la vigilancia de una frontera de más de 640 kilómetros, asediada por el contrabando y el tráfico de armas y de drogas.
Nada conduce a la posibilidad de diálogo
La semana pasada se desató un nuevo cruce de comunicados entre Colombia y Ecuador, luego de que ese país asegurará que en nuestro territorio hay ecuatorianos secuestrados y que le entregó a Colombia las coordenadas de donde estarían los cautivos. Bogotá negó tal información.
El presidente Álvaro Uribe aseguró que no viajaría al encuentro de la CAN, que se inicia hoy en Guayaquil, por “falta de garantías”, por lo que Correa lo calificó de “insolente” y “grosero”.
La presidenta del Parlamento Andino, Ivonne Baki, consideró como un “error” la ausencia del presidente colombiano, Álvaro Uribe Vélez, en la Cumbre Andina de Naciones, que tendrá lugar hoy en la ciudad costera de Guayaquil, en Ecuador.
Dato clave
Información hallada en el computador de ‘Raúl Reyes’ dice que el propósito era entregar a Correa un grupo de secuestrados para que el Mandatario lograra más protagonismo.
Mientras el presidente Rafael Correa no le dé vuelta a la página de lo ocurrido durante la Cumbre de Mandatarios de Río, celebrada en marzo de este año en República Dominicana, será casi imposible que se restablezcan las relaciones diplomáticas entre Ecuador y Colombia.
Así lo consideran analistas de ambos países, quienes aseguraron que a Correa le dolió el ataque del Ejercito colombiano a las Farc en su territorio, donde fue dado de baja ‘Raúl Reyes’, pero no tanto como el hecho de que el presidente Álvaro Uribe Vélez haya dejado en evidencia, y en una cumbre internacional, sus vínculos con la guerrilla de las Farc.
Durante el encuentro, el Primer Mandatario colombiano leyó con fechas y nombres los correos en los que los máximos cabecillas de esa guerrilla mantenían comunicación con altos funcionarios del Gobierno del vecino país.
Ese es, de acuerdo con el asambleísta ecuatoriano Andrés Pabón “el gran resentimiento del presidente Correa”.
“Incluso, tengo unos documentos del Gobierno de Panamá que evidencian esa estrecha relación entre Correa y las Farc. Y si a esa situación le suma la pugna en el continente entre la derecha y la izquierda, eso hace más difícil que se pueda dar un acercamiento”, dijo Pabón.
Para el internacionalista Enrique Serrano el presidente Correa no sólo no ha superado lo vivido en la cumbre, sino que mantiene una actitud vergonzante.
“Es como si antes del ataque al campamento de las Farc en el mes de marzo, ya el Presidente de Ecuador tuviera cosas que ocultarle al Gobierno de Colombia y eso dificulta el acercamiento”, dijo Serrano.
El analista Juan Manuel Charry comparte la apreciación de que no es fácil el restablecimiento de las relaciones, “pero porque se han radicalizado las posiciones y eso hace necesario buscar una salida por la vía diplomática”.
“Sin duda Correa tiene un argumento fuerte que es la intangibilidad del territorio y que Colombia violó su soberanía, pero a su gobierno también le disgustó mucho que se revelara la información de los computadores de ‘Reyes’”, dijo Charry.
"Para poder encontrar una salida que permita superar la crisis diplomática que existe entre los gobiernos de Colombia y de Ecuador es necesario despolitizar y despersonalizar las relaciones binacilonales”. Enrique Serrano, internacionalista. "Las más beneficiadas con el rompimiento de las relaciones diplomáticas entre Colombia y Ecuador son las Farc que, sin los operativos conjuntos, se les facilita el tráfico de drogas y armas”. Juan M. Charry, analista.
No son muchas las salidas
De acuerdo con los especialistas, el único lugar en el que se pueden encontrar los dos gobiernos y buscar alternativas para superar las diferencias es en el diálogo.
Lenín Hurtado, otro asambleísta ecuatoriano, asegura que Correa ha buscado por todos los medios la normalización de las relaciones, pero no ha habido un planteamiento serio de parte de Colombia.
“No es que el presidente Correa quiera escuchar una disculpa o algo del Gobierno colombiano. Por el contrario, lo que no quiere es escuchar a Uribe hablando de acercamientos y voluntad, y que luego salga uno de sus ministros a decir que en Ecuador protegemos a la guerrilla de las Farc”, indicó Hurtado.
En contraposición a él se mostró el internacionalista Serrano, quien dijo que Correa no ha sido receptivo con las intenciones manifiestas de Colombia de hallarle una salida a la crisis binacional.
En su concepto, se deben establecer programas de cooperación militar, en infraestructura y política exterior que estrechen la relación entre los países.
La propuesta de Charry, además de buscar un acercamiento diplomático, es que se vincule a un tercer país.
“Esa confianza que reclama Correa está lejos de restablecerse y habría que pensar en la mediación de un tercer país como Brasil y el presidente Luis Inacio Lula da Silva”, señaló el analista.
Pero para cualquier salida es necesaria la voluntad política y esa es, según lo dicho por los gobiernos de Ecuador y Colombia, lo que no ha tenido su contraparte.
Mientras tanto, las Farc continuarán sacando provecho de la falta de comunicación y de operativos conjuntos que dificultan aún más la vigilancia de una frontera de más de 640 kilómetros, asediada por el contrabando y el tráfico de armas y de drogas.
Nada conduce a la posibilidad de diálogo
La semana pasada se desató un nuevo cruce de comunicados entre Colombia y Ecuador, luego de que ese país asegurará que en nuestro territorio hay ecuatorianos secuestrados y que le entregó a Colombia las coordenadas de donde estarían los cautivos. Bogotá negó tal información.
El presidente Álvaro Uribe aseguró que no viajaría al encuentro de la CAN, que se inicia hoy en Guayaquil, por “falta de garantías”, por lo que Correa lo calificó de “insolente” y “grosero”.
La presidenta del Parlamento Andino, Ivonne Baki, consideró como un “error” la ausencia del presidente colombiano, Álvaro Uribe Vélez, en la Cumbre Andina de Naciones, que tendrá lugar hoy en la ciudad costera de Guayaquil, en Ecuador.
Dato clave
Información hallada en el computador de ‘Raúl Reyes’ dice que el propósito era entregar a Correa un grupo de secuestrados para que el Mandatario lograra más protagonismo.
Tomado de El País de Cali.